domingo, 23 de mayo de 2021

El zorro y el lobo

 Fábula: El zorro y el lobo 

Autor: Pérez Domínguez Brenda Mariana

Antes de que aparecieran de los humanos sobre la tierra, los animales llegaron a vivir y explorar las zonas en donde podían habitar. Unos echaban la flojera en el desierto, bosque, selva y mar. Tenían un montón de cosas que les hacía paro para vivir a todo dar, en donde estuviesen se sentían bien, siguiendo la cadena alimenticia pero un día, un zorro se preguntó:

‘’Todos los animales somos muy diferentes, pero… ¿No hace falta algo?’’.

Un lobo que estaba en la lela se encontraba perdido y no sabía como volver a casa, vio al zorro y decidió comérselo, pero antes preguntarle como podía llegar al bosque más cercano.

‘’Hola amigo zorro, ¿sabes la ruta más cercana para llegar al bosque?’’.

El zorro contestó:

¿Para qué quieres saber en dónde está el bosque?

Para llegar a mi casa y poder comer, las tripas me gruñen.

Esta bien lobo, te enseñaré el camino para llegar al bosque, pero también tendrás que ayudarme a buscar lo que le hace falta a nuestro mundo.

¿Qué es eso que nos hace falta? -preguntó el lobo.

No lo sé, pero tendrás que ayudarme a buscarlo.

Ambos emprendieron el camino para encontrar lo que el zorro buscaba, pero el lobo impaciente después de caminar mucho sin encontrar nada, decidió comerse al zorro:

Ya no aguanto más, tonto zorro, solo querías cansarme para que no te comiera.

No lobo, ese no es mi plan. Ponte listo y ayúdame, siento que estamos muy cerca.

Muy tarde zorrito, te voy a comer.

El lobo al ser más grande que el zorro, consiguió intimidarlo y lo acorraló. Cuando de pronto escucharon el llanto de un bebé humano. Los dos animales se sorprendieron tanto que por instinto nato fueron a dirección del lloriqueo:

¡Mira lobo, es un bebé!

No se ve normal, es de color azul, cuernos como los toros y 3 ojos, ningún animal tiene 3 ojos. Esto es otra especie. -contestó el lobo.

Creo que es él lo que estaba buscando, lobo.

Genial zorro, porque ya tengo mucha hambre, vamos a tragarnos a este niño.

No lobo, este niño tiene una misión importante, no puedes comerlo, es especial.

Pues yo soy el más fuerte de aquí y no es momento para cursilerías, me voy a comer a ese niño.

El bebé al notar el panorama comenzó a llorar muy fuerte, asustado por lo que pasaba y cambió su color de azul a rojo, se elevó a la altura del lobo y con una voz muy gruesa proveniente de su tercer ojo le dijo:

Te crees más grande y poderoso que el zorro y creíste que podías comerme, soy Εξέλιξη un Dios de la evolución y puedo eliminarte de la cadena alimenticia si se me antoja. Te equivocaste por tu ego, por eso te castigaré, si te encanta comerte a quienes encuentras en el camino, tu castigo será por siempre andar solo, nunca encajarás en las manadas. Y a ti zorro, te agradezco por cuidarme, te daré eso que tanto buscabas, crearé a los humanos para que puedan amarse entre sí.

Y así fue como los animales dejaron de hablar y aparecieron los humanos, para amarse entre especies muy distintas.

Moraleja

A pesar del tamaño y la imposición del lobo, el zorro no permitió que sus intereses se vieran dañados por el lobo. A veces cuando uno se siente más que otro tiende a ser egocéntrico y eso trajo una consecuencia para el lobo, por querer ser más que los debas y pisotearlo a su favor, el lobo fue castigado por eso y excluido, en cambio el zorro fue premiado. El bebé resultó no ser alguien indefenso e incluso más poderoso de lo que el lobo pensaba, sorprendiendo al ego del lobo y dando una lección a este.  






El zorro y el lobo

 Fábula: El zorro y el lobo  Autor: Pérez Domínguez Brenda Mariana Antes de que aparecieran de los humanos sobre la tierra, los animales lle...